Café y Salud Femenina

Cuando tomamos café, nuestro cuerpo libera cortisol, la hormona del estrés. Esto puede desbalancear tu ciclo hormonal, especialmente si ya estás lidiando con problemas como candidiasis o alteraciones hormonales. Pero tranquila, no se trata de eliminarlo por completo, sino de aprender a disfrutarlo sin afectar tu bienestar. Aquí te cuento cómo evitar que el consumo de café afecte tu equilibrio hormonal, especialmente si tienes candidiasis y alteraciones hormonales cíclicas.

1. Moderar el Consumo

 Limita el consumo a una taza al día, preferentemente en la mañana, para evitar sobrecargar tu sistema nervioso y hormonal. La cafeína en exceso puede aumentar los niveles de cortisol (hormona del estrés) y desequilibrar las hormonas sexuales.

2. Escoge Variedades de Café Saludables

Prefiere café orgánico para evitar residuos de pesticidas, que pueden actuar como disruptores endocrinos. Busca opciones menos ácidas para no alterar el equilibrio del ph intestinal, lo cual es clave para controlar la candidiasis.

3. Cuida la Preparación

Usa endulzantes naturales como stevia o evita endulzar y, opta por alternativas vegetales sin azúcares añadidos, como leche de almendra o coco, ya que los lácteos pueden fomentar el crecimiento de cándida.

4. Combínalo con Alimentos Saludables

Ideal que acompañes el café con grasas saludables (palta, frutos secos) para moderar el impacto en la insulina. No lo tomes en ayunas, ya que puede aumentar la acidez y el cortisol.

5. Reduce el Estrés

Practica técnicas de manejo del estrés como yoga o meditación para minimizar el impacto del cortisol, especialmente si consumes café.

6. Observa tu Ciclo Hormonal

Durante las fases más sensibles del ciclo, como la fase lútea (antes de la menstruación), reduce o elimina el café para evitar alteraciones hormonales.

7. Evalúa Alternativas

Prueba como te sientes tomando infusiones (manzanilla, menta), café de cereales (sin gluten) como reemplazo, especialmente si notas sensibilidad hormonal al café.

El café no tiene que ser tu enemigo, pero es importante consumirlo de forma consciente si quieres cuidar tu equilibrio hormonal. Pequeños cambios, como evitarlo en ayunas o reducir su consumo en ciertos días del ciclo, pueden marcar la diferencia. Recuerda: cuidar tus hormonas también significa disfrutar lo que amas, pero con amor hacia tu cuerpo.